Hoy recuperamos una de las temáticas con más tirón entre los apasionados de la Segunda Guerra Mundial: las tropas aerotransportadas americanas. Recorreremos la península del Cotentin a la busca de los numerosos monumentos acerca de la participación de las tropas aerotransportadas americanas en el Día-D.
Son muchas las historias detrás de cada una de las estatuas, placas y monolitos. Historias la mayoría de las veces en honor de unidades en conjunto, desde regimientos hasta pequeños grupos como los famosos «Filthy 13. Pero en Normandía también se recuerda a soldados en particular. Sin duda el más conocido en John Steele, quien permaneció tiempo suspendido del campanario de la iglesia de Sainte-Mère-Église y hoy representado por un maniquí. Pero no menos impresionante es la historia personal de otro paracaidista, Joseph Beyrle, el único ciudadano americano que se tiene constancia que combatió durante la Segunda Guerra Mundial tanto con el ejército de los Estados Unidos como con el de la Unión Soviética.
Cada uno de los regimientos paracaidistas y de planeadores de las divisiones americanas 82 y 101 está representado por monumentos individuales, y todos representados por la famosa estatua titulada «Iron Mike» y situada en La Fière. 
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¡ ROMPAN FILAS !
Si estáis interesados en visitar el museo, os dejamos un link con toda la información: 
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En el capítulo de hoy las iglesias también tendrán cierto protagonismo. Algunas como la de Sainte-Mère-Église por ser uno de los primeros pueblos liberados de Normandía y otras como la de Angoville-Au-Plain por haber sido testigo de un suceso extraordinario.
Hoy el co-director del museo, Emmanuel Allain, nos abre las puertas de esta increíble colección que hará las delicias de los entusiastas de la división 101. Pero los interesados en sus homólogos alemanes, los Fallschirmjäger también estarán de suerte, pues junto a la parte dedicada a los paracaidistas americanos, el museo alberga el